ATRAPADOS EN EL SISTEMA

Creo que la sociedad española, como bien decía Steve Jobs sobre el consumidor, “no sabe lo que quiere” o sí, quiere lo que tiene el vecino. . Discutir hoy en día sobre economía o política con alguien que lee las noticias es deplorable, inútil y bastante triste.

Antes de enervar al lector más allá de estas líneas debo hacer un inciso y decir que todo lo que se lee es una opinión – Marco Aurelio - . Ni editoriales ni prensa ni blogs ni Twitter dicen como es la realidad, simplemente opinan sobre ella. Dicho esto, sigo.

El bipartidismo, con el incio de la crisis, se está empezando a tambalear en algunos países. En Inglaterra, en el 2010 el golpe lo asestaron los LibDem, liderados por Nick Clegg, cuando obligó a repetir las elecciones generales. En 2012, con la grave acentuación de la crisis, el golpe en Grecia lo ha asestado Syriza.

Lo que me preocupa no es la ideología de la gente que compone esta sociedad española, porque apenas nadie sabe lo que quiere. Lo que muchos saben es lo que no quieren y apoyan cualquier tipo de cambio con tal de salir de la situación en la que no viven felices. Sólo contemplan que el gobierno se vaya, pero no saben que gobierno quieren que venga.

Algunos apoyan los pilares del Estado de Bienestar e igualdad de derechos sociales. Por consiguiente se hacen llamar socialistas. Apoyan al PSOE y dan bastante asquete. Señores,  “el primer fundamento del socialismo es el despojo de los bienes capitales” (Rousseau). Espero ver a todos esos que se llaman socialistas que se deshagan de sus casas, sus coches, sus iphones y todos sus bienes que compraron con el dinero devenido del sistema capitalista. Además,  el apoyo al Estado de Bienestar, según Offe, incluye ideas liberales-demócratas. Sin embargo, el Estado de Bienestar, cogido de la mano del capitalismo, es el alter ego del movimiento obrero.  

Desgraciadamente, el neocapitalismo, introducido en Europa en los 80 por Thatcher ha sido el sistema económico que hoy contemplamos en nuestro sistema de gobierno. Hoy en día, mientras haya democracia tal  como la concebimos, nadie puede escapar de este sistema. Las políticas socialistas son completamente inviables bajo este sistema. Eso es una de las tantas razones por las que el gobierno que conocemos como socialista siempre termina malversando fondos.

Votar a Rubalcaba no es la solución.